miércoles, 16 de abril de 2008

El Soho

Ahora resulta que vivo en el Soho. Según el Telediario, lo que antes era el trastero de la Gran Vía madrileña ahora se ha convertido en un hervidero de tiendas modernas, oficinas modernas, restaurantes modernos y gente moderna. Mentira. Es un hervidero, hasta ahí todos de acuerdo, pero es un hervidero de basura, asesinos, yonquis y borrachos. Y ruído, mucho ruído durante el día, provocado por las fuerzas del orden casi siempre o por borrachos que hablan a grito pelado con entes invisibles y por lo visto sordos, y a veces, con suerte, regado con un poquito de crimen etílico-pasional en medio de una plaza pública a las tres de la tarde.

Si eres tan imbécil como yo y se te ocurre acercarte a un señor policía para comentar que en la puerta de tu casa hay un presunto ser humano de sexo indefinido tirado en el suelo, con los pantalones bajados y sus propias heces por sombrero (a las doce del mediodía de un martes cualquiera) corres el riesgo de que:

1) Te pegue una hostia y te mande al cuartelillo.
2) Te pida el DNI y te pegue una hostia.
3) No te haga ni caso, te pegue una hostia y encima detenga a un chaval que está jugando con el monopatín en la plaza mientras al lado queman viva a una anciana.

Traducido al neocon, que en el telediario se anuncie como nueva zona comercial hype tu propio barrio lo único que quiere decir es que te van a subir el alquiler, van a cerrar todos los bares y discotecas de la zona y van a hacer de tu vida un infierno peor, eso sí, con un Starbucks a los pies de la cama.

Gracias Cameron, gracias Almudena.

PD: Ya me han subido el alquiler. El Soho rules.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Qué razón tienes amiga. Ayer sin ir más lejos conté más de 20 personas tiradas por las calles aledañas a nuestras casas. El más peculuiar lo encontré en la calle Preciados, que además de estar tirado, se estaba calentado una fabada con un camping gas. La policía pasó por delante y no dijo ni mu. Este Soho es mucho Soho.

Anónimo dijo...

Es lo que tiene el Soho, sí.
Hace unos días mientras volvía a casa cargada de bolsas de la compra esquivando yonquis y cacas de perro (ésto es muy del Soho) ví como un tipo manipulaba con un alambre la cerradura de un coche y lo abría; se me ocurrió llamar a la policía para denunciar el hecho y, después de media hora a la espera y una detallada descripción de los hechos, el señor al otro lado del auricular sólo acertó a preguntarme insistentemente cómo podía yo saber que ese no era el vehículo del sujeto en cuestión y me tomó, eso sí, todos los datos. Tras otra media hora de conversación absurda y llegados a un punto en el que yo ya no sabía si hablaba con el 112 o con una operadora de telefónica admití mi derrota y convine con mi interlocutor en que, siendo éste un barrio germen de tendencias, efectivamente era probable que no se tratara mas que de una llave de diseño y que el desaliño del portante del objeto respondiera a un look extremo a lo pete doherty de esos que causan furor en los aledaños de la plaza de los luna, hervidero de tendencias y centro neurálgico del Soho.

Yo ya lo sabía dijo...

Cualquiera que lea esto se puede llevar a engaño... Puede parecer que somos tres alegres humoristas del club de la comedia haciendo un brainstorming para nuestro próximo monólogo...